miércoles, 24 de agosto de 2011

Anexo 1. Curiosidades y cosas varias




Puesto que considero que las curiosidades son la sal y pimienta de los viajes ahí os hago una primera entrega después de esta semana de viaje.


Escobillas del WC. No existen en los hoteles. De momento ní una. Esto me plantea posibilidad de negocio: ¿cuantos inodoros puede haber en todo el Oeste? Cientos de millones; pues calculad.

Mandos de las duchas. Cada vez que entro en un alojamiento nuevo, me enfrento a un reto diferente: ¿ Cómo diablos se usa el mando de la ducha? La noche en Tahoe tuve que llamar a la recepción pues no era capaz de que saliera agua. En algunas hay que haber pasado antes por un master de fontaneria en la Universidad de Berkeley.

Alfombras. Creo que somos el único país de entre los que nos consideramos civilizados que no pone alfombras en los hoteles. Un poco antihigienico, pero salvó la vida de mi cámara en Salt Lake city. Se me cayó al suelo y rebotó sobre un mullido lecho de fibras, hogar de ácaros y otros microorganismos. La cámara resultó ilesa pero siento las bajas entre la comunidad ácara

Wifi. Todos los hoteles cuentan con él, afortunadamente para este blog. Se pronuncia “Guaifai”. También en muchos más sitios como mi coche con aire aconcicionado junto a una biblioteca pública.

Horarios. En este país son tan tempraneros que a las 9 termina el servicio de desayuno en los hoteles que lo llevan incluido. Ni que decir tiene que en alguna ocasión me he tenido que ir al bar de enfrente. Y como quieras cenar mś tarde de las 10, "you ŕe fucked"

Coches Automáticos. Aquí todos van así; pero después de una semana , no me convence. Muy cómodo, americano-funcional (como diría Javier Krahe), y todo lo que se quiera pero es un coche para el que no le guste conducir. Permites que el coche te controle a tí y no al contrario. Y no me gusta nada que en los adelantamientos él decida la marcha que debe llevar. Si te consideras conductor, hay que llevar cambio manual, y si no, por qué los coches de F1 llevan marchas ¿eh?

Rotondas. Sólo dos en no sé cuantos miles de km realizados. Este es el país de los cruces y los stops.

Intermitentes. Los traseros son de color rojo. No entiendo la razón. Me lo expliquen

Giros a la derecha. Se puede girar a la derecha con semáforo en rojo, siempre y cuando tengas cuidado y cedas el paso a los que vienen por tu izquierda. Curioso.

Semáforos. Ojito , que estan situados siempre al otro lado del cruce.Yo ya venía avisado (Gracias Sorin, tu gran susto en Las Vegas me sirvió de mucho).

Gasolineras. El primer día que reposté, dependí de un buen samaritano que me ayudó pues al principio es un galimatias. Todos los surtidores llevan lector de tarjetas (Crédito, débito..) y puedes llenar sin pasar por caja. Primero lees tarjeta, luego levantas la manguera y finalmente llenas. Cuando acabas, la máquina te extiende un recibo. Si pagas con “cash” tienes que pagar por adelantado en la caja.

El interior de las gasolineras es como un mundo aparte. Parecido a nuestras Repsol pero a lo bestia. Algunas como las “Maverick” tienen dispensadores de refrescos y hielo picado en vasos de plástico y pajitas como en el cine. Y lo más son los pequeños buffet de ensalada. Lástima que todo lo aliñen con salsas y no con aceite y vinagre.

TV y Radio. Casi todo en inglés y casi preferible a las cadenas o emisoras en español. La TV latina es horrible, las películas americanas dobladas al “guanchito” no tienen precio y los culebrones superan en horror a los que pasan por las TV españolas. Lo último son los telepedicadores que han importado de Brasil (ahora tan de moda allí). Uno lo ve y piensa que si hay Dios cómo puede permitir esto. Yo los mandaba a la cámara de gas , directamente. Para potar.Las cadenas de radio hispanas pueden salvarse siempre y cuando no pongan lo último del “pinche-pancho” , o como quiera que se llame.Las americanas, suelen tener buena música incluso acorde con el paisaje como un buen country.

Idioma. Inglés, aparentemente, porque he llegado a pensar que he tirado el dinero de mi padre y el mio propio en cursos de inglés y al final para nada. Pero nada más lejos de la realidad. Me he entendido perfectamente con gente de la costa este, estado de Washington y un inglés errante y la verdad que el problema lo tienen los del midwest en la boca. Incluso me las arreglé con un matrimonio de Minnesota, que por cierto, me han recomendado que visite una localidad de Arizona llamada Sedona y que me queda bien de camino. Como me dijo ella: “You have to be flexible”. Pues eso. Para ver las diferencias de léxico con los “british” haría falta un monográfico.


Mexicanos. Por todas partes. De hecho el 100 % de los hispanos que he visto y con quien he hablado son de alli, desde los nacidos en los USA y alos que le cuesta cambiar al español hasta todo lo contrario. Recién emigrados con serios problemas para comunicarse en inglés. Casi todos los que he visto trabajan en hosteleria y por cuenta ajena (y seguramente explotados).


Motos. La Harley aquí es religión, como en todas partes, pero multiplicado por mil. Aquí abundan los tipos maduros con sus barbas y greñas, tatuajes y toda la estética que uno se puede imaginar. Están por todas partes.

Camiones. Preciosos y enormes. Por la noche lucen como árboles de navidad. Quiero unooooo!!!

Deportes. No entiendo el fútbol americano....y el beisbol menos

Cerveza. En muchos sitios si dudas entre la amplia variedad te ofrecen un “taste” o cata de un par de tipos diferentes para que elijas . Buena costumbre.

Gente. Bastante amable, pero as lo suyo. A veces te encuentras con gente curiosa, que incluso llegan a preguntarte de dónde eres, pero no es lo normal. Si te ven en apuros hay veces que ni hace falta pedirles ayuda, ya se ofrecen ellos.

Saludan bastante en los sitios más insospechados. Las mujeres te lanzan una sonrisa de como “hello” y los hombres mueven ligeramente la cabeza como diciendo ¿Qué tal?. Por estas tierras tan agrestes son terriblemente educados y se interesan en que lo pases bien, como en el rodeo: uno de los comisarios me dijo que esperaba que lo hubiera pasado bien. Al decirle que era español , se le hinché el pecho de orgullo, pues son muy amantes de los suyo.

De momento son zonas muy tranquilas con indice de criminalidad casi nulo.

De la “gastronomia” (¿conoceís algún libro de gastronomia americana, o inglesa?, pues eso mismo) ya hablaré cuando logre que me baje el colesterol.



Habrá más entregas de curiosidades varias....

1 comentario:

  1. viendo tanta curiosidad, parece como si estuvieras en otro pais, dentro de nada te veo buscando los camiones de Campofrío.

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